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La digitalización del sector ferroviario es un elemento tractor de la innovación, a varios niveles (operaciones, sistemas, servicios, infraestructuras…). El proceso está impulsando la adopción de servicios y soluciones que aumentan el atractivo del sector, bien como una alternativa de transporte más competitiva (en pleno auge de la intermodalidad, como explicamos, en este mismo blog, el caso del Trambahía), bien como método más fiable y eficiente para el transporte de mercancías.

La industria española está a la vanguardia tecnológica mundial, exportando conocimiento a todo el mundo (por ejemplo, en el campo de la alta velocidad, donde es un referente). Esto es posible en parte gracias a la intensa actividad de I+D en el sector: el 4% de la facturación es invertida en acciones de I+D, según datos de MAFEX, la Asociación de la Industria Ferroviaria Española. Esta inversión hace posible que el país cuente con unas redes de transporte a la vanguardia tecnológica, de las más eficientes y sostenibles de Europa. Y es, precisamente Europa, uno de los factores que más peso tienen en el presente y futuro de la innovación ferroviaria.

El impacto de los fondos europeos en el I+D ferroviario

Durante el Programa Horizonte 2020, España alcanzó en cuanto a proyectos de colaboración en I+D financiados por la Comisión Europea, posicionándose en cuarto lugar en cuanto a fondos obtenidos, tras Alemania, Reino Unido y Francia.

Los fondos para financiar proyectos de investigación contaron, en 2020, 2021 y 2022, con 820 millones de euros, 1.022 millones de euros y 1.021 millones de euros, respectivamente, provenientes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Parte de esta financiación está orientada a lograr una red ferroviaria europea de alta capacidad más cohesionada, eliminando obstáculos a su interoperabilidad para facilitar operaciones, la gestión del tráfico y de infraestructuras, la implantación de nuevos servicios…

En definitiva, lograr que un sector crítico para Europa sea más competitivo mediante la reducción de costes, el aumento de su capacidad, su flexibilidad y su fiabilidad, algo que, sin los actuales esfuerzos en I+D, sería imposible. Y, sin estos, tampoco lo sería el viaje de la industria hacia la sostenibilidad.

Sostenibilidad y digitalización: dos ejes de la movilidad del futuro

En síntesis, parte de los esfuerzos en I+D están concentrados hoy en Europa en dos áreas principales: sostenibilidad e innovación. Ambos ejes marcan la hoja de ruta de la evolución de la industria y lo seguirán haciendo en los próximos años.

Existe una relación entre ambos, ya que, para alcanzar las ambiciones del Pacto Verde Europeo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, es necesario avanzar en cuanto a implantación tecnológica y digitalización – así, como, por ejemplo, en la aplicación de fuentes renovables y nuevos vectores como el hidrógeno verde, en el transporte de mercancías.

Todo apunta a que el transporte por ferrocarril, por otro lado, tendrá un papel protagonista en la movilidad europea del futuro. Esto se debe a su reducido impacto ambiental respecto a otras alternativas y a la seguridad de las operaciones, su electrificación, resistencia en diferentes condiciones y capacidad para satisfacer las necesidades diarias de clientes con necesidades complejas.

Retos y futuro del sector ferroviario

El crecimiento de los núcleos urbanos, las ambiciosas metas medioambientales, el envejecimiento de la población y otros factores están transformando, como muchas otras, esta industria. No son retos de sencilla resolución, por lo que requieren una decidida apuesta por la I+D. Cada vez más, el sector debe mirar al futuro e imaginar nuevas soluciones, mediante la inversión en investigación, más que al pasado en busca de inspiración previa.

El futuro es complejo y las soluciones para abordarlo se deciden hoy. El sector aborda retos diversos y desafiantes, más allá de la sostenibilidad y la digitalización, como nuevos paradigmas en el ecosistema industrial, la necesidad de optimizar las operaciones sin impactar en la experiencia del usuario y, sin duda, captar, capacitar y retener el talento. Para abordar estos y otros retos, la apuesta por la I+D debe ser decidida y sostenida en el tiempo. Solo así seremos capaces –como en el pasado– de sentar sólidas bases para lograr una industria ferroviaria resiliente y sostenible.

Informe del Área de Innovación de MAFEX

Retos y oportunidades del mercado que suponen un gran interés para la industria ferroviaria.

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